Vilner a realizado un grandísimo trabajo, al menos eso me parece. Estéticamente no tocan prácticamente nada. Le montan llantas de la propia Mercedes, y de aquella época, pero pintadas en un tono marrón oscuro, y la carrocería tiene un tono blanco "sucio", con detalles como el numero 51 sobre fondo marrón.
Desde luego, todos los cromados se han renovado, se han cambiado las piezas necesarias y se ha restaurado otras tantas, dejando el coche sin accesorios innecesarios y completamente de serie, si exceptuamos el mencionado cambio de color y los números.
Si se ha cambiado en interior, y de que manera. Tapizados nuevos para la totalidad del mismo, con colores marrón y un blanco "hueso" que combinan de cine. Se nota que la empresa es especialista en interiores. El cuero alcanza el salpicadero y llega hasta la parte baja del habitáculo, casi hasta el suelo, con diseño en diamante en los asientos y paneles de puertas. Todo cosido a mano.
El volante a mi parecder es lo mejor, y ademas, fabricado en madera de caoba. Al igual que la carrocería, los cromados de renuevan y recibe bordados con la denominación "Gentle Pagoda" en puertas y asientos. Los umbrales también lucen la denominación del proyecto sobre placas de aluminio envejecidas.
Nadie dice que a día de hoy los coches no sean para gente con dinero, pero desde luego, es menos acusado o se nota menos. Además, coches como el Pagoda, con su motor de seis cilindros estaban destinados a otra clase de clientes, exactamente igual que ahora, ya que el Mercedes SL es el modelo que continúa con esta saga. Al menos podemos disfrutar de estos coches como clásicos, a un precio algo menos que en la época, Menos es nada. Y si quieres, se lo dejas a la gente de Vilner, puedes tener uno como el de las fotos, haciéndolo más exclusivo.
Me gusta mucho el resultado del proyecto. ¿Y a vosotros?
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